El corazón de estos artistas palpita como el tic tac que se produce al agitar una lata de aerosol.
De manera ilegal y con el temor de ser apañados por la Policía exponen sus obras en la galería más grande del mundo: la calle.
Pero sus obras no son sólo graffitis improvisados, sino obras planeadas, bien ejecutadas y colocadas en lugares estratégicos con un mensaje implícito a la vista de todos.
Algunos lo llaman arte urbano, otros guerrilla art, arte desobediente o simplemente estencilismo.
Una mica perforada en la que plasman sus ideas -que les llevó horas prepararla-, una lata de aerosol y después a buscar el poste, la barda o la caja de teléfonos en la que puedan dejar impresa su obra de arte. Así es como funciona la técnica del estencilismo, rama del neografiti, que a la fecha está abriendo su brecha en las calles.
Desde una carita feliz con un letrero que dicta sonríe o el rostro de Charles Chaplin, hasta unas más elaboradas como la de un chico cargando un inmenso misil, o la de una pistola quebrada de la que brotan algunas notas musicales, son algunas de estas obras que se pueden ver en Guadalajara.
Pero a pesar del sentido artístico, más que vender, como los grandes letreros de McDonald’s, Coca-Cola o la publicidad de los partidos políticos, que para los especialistas en diseño son pura contaminación visual para la Ciudad, estas obras son ilegales.
“La calle es un foro abierto en donde todo momento se están tirando mensajes. Si te los están tirando para venderte algo, ¿por qué no hacerlo para ponerte a pensar algo, concientizarte o simplemente para pintarte una sonrisa en la cara?”, opina Ricardo Morales, ex miembro del colectivo Hematoma, con el que invadió la Ciudad de los “Carteles de la Justicia”.
“Yo creo que es como adornar tu Ciudad, como si adornaras tu cuarto”, explica Pablo, un chico que se ha dedicado a llenar la ciudad de vampiros: “no es tanto como tener una firma. Yo lo veo como decorativo y como juego, aunque también lo puedes utilizar para provocar. Yo uso un vampirito. Una vez pegué uno en un camión y una señora me preguntó que si era una religión”.
¿De dónde salió todo esto?
Todo empezó por el graffiti y por intentar darle un sentido a los rayones que las pandillas utilizaban para marcar su territorio.
“En Guadalajara la primer forma de neograffiti que empecé a ver fue hace unos tres años”, narra Walter, un chico de 27 años que lleva 15 pintando bardas y que desde hace año y medio tomó la técnica del esténcil para difundir la no violencia bajo la firma de “Queen”.
Los fundamentos están en las manifestaciones de artistas clásicos como Jean Michel Basquiat, Keith Haring y Blek y en los dos íconos del guerrilla art: Shepard Fairey -conocido por el colectivo Obey- y Robert Banks -mejor conocido como Banksy-.
El nombre de estos artistas ha recorrido el mundo y mientras que Fairey ha volcado su fama a grandes campañas publicitarias, Banksy es uno de los personajes más buscados en su natal Inglaterra, por las fuertes críticas que hace con sus esténciles tanto a la política como a la sociedad británica.
Entre las piezas de Banksy, se encuentra la que realizó de dos policías ingleses de tamaño real que lucían por las calles dándose un intenso beso.
“Desde que la secundaria hacía graffiti, pero cuando fui a Londres vi los esténcil de Banksy y a partir de entonces he hecho pósters, calcas y esténcil”, explicó Beto, autor del misil con alas que también ha invadido varias bardas de la Ciudad.
En México, Tijuana para ser precisos, surgió uno de los mayores exponentes del esténcil mexicano a nivel internacional, de nombre Gerardo Yepiz, mejor conocido como Acamonchi. Sin embargo, en Guadalajara el arte callejero está en pañales.
“Estamos súper verdes, pero por algo se empieza”, explica Norma, una chica que se dedica al diseño de modas y que empezó en esto del neograffiti pegando zapatos en el free way de Los Angeles, y que en Guadalajara aplica la técnica del esténcil en carteles como el de un payaso que juega con unas pelotas y que se puede ver en varias esquinas de la Avenida Chapultepec.
Norma asegura que el ser mujer es una ventaja para correr menos riesgo de ser apañada por los policías.
Allí está el caso de NIÑA o NYÑA de quien sólo se sabe es una punketita que ha invadido la Ciudad con un grito delicadamente femenino y a la vez agresivo, con tan sólo pegar su nombre por toda la Ciudad.
Para conocer a estos chicos sólo basta mantener los ojos bien abiertos a la gran exposición que se vive día con día en la Ciudad.
¡Hazlo tú mismo!
Arte urbano para uno, arte desobediente para otros, el estencilismo es una rama del neograffiti y se logra siguiendo los siguientes pasos:
-Convierte tu imagen a blanco y negro (escala de grises) en programa Photoshop, aplica la herramienta de alto contraste (brillo/contraste) e imprímela.
-Procura dejar espacios en blanco, no cerrar el contorno de la figura, para que al cortar no se vaya toda la imagen y se emplaste totalmente. De preferencia, utiliza formas, símbolos, ilustraciones o retratos que sean reconocibles a gran distancia.
-Coloca la imagen sobre una superficie plana y encima ponle una mica transparente. Con un cúter o exacto recorta en la mica los espacios negros de la imagen.
-Ya tienes tu esténcil listo. Compra tu lata de pintura, elige tu espacio favorito y ¡diviértete!
Para empaparse…
-www.woostercollective.com
-www.space-invaders.com
-www.wkinteract.com
-www.esm-artificial.com
-www.thepoplab.com
-www.stickernation.net
-www.ithrowup.com
-www.stickerobot.com
-www.stencilrevolution.com
-www.banksy.co.uk