‘Adorna’ el graffiti ruinas del Ixtépete  

Pide el INAH al Ayuntamiento de Zapopan que limpien la pintura del lugar
Las ruinas arqueológicas del Ixtépete se encuentran dañadas por el graffiti, el cual se observa hasta en el más recóndito espacio.

Desde hace dos semanas, personal de Mantenimiento Urbano comenzó la limpieza de la pintura en las ruinas, donde el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se los permite y a petición del mismo.

“Está muy graffiteado, es increíble que no haya una pizca de humanidad en esa gente, se metieron hasta las tumbas y graffitearon”, señaló Vladimir Avilés Márquez, director de Mantenimiento Urbano de Zapopan.

Explicó que en lo que va de la Administración no habían acudido al Ixtépete para limpiar el graffiti porque está bajo cuidado del INAH y fue hasta que la delegación del instituto conoció el trabajo de la máquina antigraffiti cuando comenzaron a trabajar en las ruinas.

“No habíamos entrado porque había problemas con el INAH, cuando vieron los equipos funcionando a través de los medios de comunicación, se dieron cuenta que no degrada el material y fuimos autorizados para entrar”.

Avilés Márquez señaló que aunque con la máquina antigraffiti no se degrada la superficie por el efecto de las sales de bicarbonato de sodio con las que funciona, en algunos puntos del Ixtépete será necesario hacer la limpieza con más cuidado, ya que por lo menos una tercera parte del lugar tiene graffiti.

MURAL recorrió las ruinas y confirmó los daños, ya que alrededor de las dos edificaciones arqueológicas se observan los rayones que plasman grupos de jóvenes. Incluso en zonas donde está prohibido el ingreso, también se detecta el graffiti.

Aunque está delimitada el área de las ruinas y tiene cerca, los vecinos del lugar abrieron la malla para cortar camino, por lo que el parque arqueológico se ha convertido en zona de tránsito peatonal y de bicicletas.

Desde el ingreso, que siempre está abierto y sin vigilancia, hay graffiti, en los muros y hasta en los señalamientos.

Algunas zonas de pastizal se observaban quemadas, lo que a decir del vigilante, Francisco Rodríguez, también es producto del vandalismo.

“Habían quedado de venir policías, pero no pasa ni una patrulla”, señaló Rodríguez.

“Nomás les decimos que no anden pintando aquí y muchos se molestan y hasta miedo nos da que nos vayan a hacer algo”.

El vigilante y su esposa comentaron a MURAL que son varios los grupos de jóvenes que hasta en el día acuden a las ruinas y debajo de los árboles se sientan a consumir bebidas alcohólicas y hasta los ven haciendo cigarros de mariguana.

Uno de los que también acude al Ixtépete a descansar con su familia es Rodolfo Pérez, quien dijo que le gusta ir a las ruinas porque está solo.

Pérez va de picnic con su esposa y sus hijos a las ruinas y mientras los adultos descansan, los menores juegan futbol.

Reconoció que está descuidado el Ixtépete, pero, aseguró, por lo menos ahora ya cortan el matorral.